lunes, 20 de octubre de 2014

LO QUE DEJÓ EL CLÁSICO

LO QUE DEJÓ EL CLÁSICO

PLATITA EN CAJA Y SOCIOS AFUERA

Ante la desesperación por generar caja, la nueva C.D; aprovechándose de la avidez por conseguir un lugar en la cancha, para enfiestar a nuestro eterno hijo, tomó de rehén al hincha y les encajó un pack a 800 mangos. Nadie que no haya sido socio, podía ver el partido lugareño, si no desembolsaba esa cantidad de dinero. Es decir; se aprovecharon del hincha; perjudicaron al socio que había pagado 160$ una platea (quedando las nuevas en un promedio de 125$) pero lo más grave, es que quedó una cantidad importante de socios, con entradas en mano y afuera del gigante (alrededor de 4000 personas)
En un error de novatos, la nueva CD, no tuvo en cuenta, que para este tipo de partidos, se debe prever, que muchos socios y familias, que habitualmente no van al gigante, asisten; sumado a eso la gran cantidad de PROTOCOLOS REPARTIDOS POR MARKETING, hicieron que el genuino motor del club, el socio que se bancó la B, poniendo la platita, se haya tenido que comer el garrón de escuchar los goles desde afuera, y cagado a palos por la policía. Evidentemente, los muchachos en situación de protocolo; miembros de  agrupaciones otrora contestatarias y que hoy son parte de la Comisión Directiva, como los periodistas que antes ponían el grito en el cielo, hasta que los invitaron a formar parte de la secretaría de prensa o les tiraron un sobrecito, han podido ver el partido desde la comodidad de sus plateas, y hoy ni mencionan el tema; cuando antes hacían foco en la violencia policial, endilgándole todo tipo de responsabilidades a la saliente C.D. Ya los vamos conociendo, y queda claro que como dice el Tango “LLORABAN PARA MAMAR”.

EL ARBITRAJE

Otra vez, un arbitraje que no estuvo a la altura de Central. Nos anulan injustamente el tercer gol de Encina, lo que hubiese desatado la catástrofe pechifresca. Sin contar la polémica jugada, donde el línea señala penal, pero el árbitro lo desestima. Más allá de si fue o no penal, es raro que el árbitro no le haga caso a su asistente. Afortunadamente, no tuvimos que lamentarnos ese fallo.

LA CURIOSIDAD

Curiosamente, el Presidente Broglia, hombre que lee las manos, tira las cartas y se interesa por lo “oculto”; desparramo un extraño líquido en el vestuario, ante la sorpresa de los empleados.
Particularmente, ese tipo de cosas me parecen inofensivas y hasta risueñas, me acuerdo que una vez el ex presidente Scarabino, plantó ruda macho en el césped del gigante. Lo que es curioso, como desde su grupo de acólitos, que se mofaban de las cábalas de Merlo o de Russo, hacen la vista gorda, ante este tipo de pavadas.
EL PARTIDO


Lo gana Russo, de punta a punta; entendiendo como se juegan los clásicos, como se arma un plantel y como planificar una estrategia. Como bien dijo Abreu, “somos pan y cebolla” y así lo ganó Central, con los pelotazos al 9, al que injustamente, algunos hoy directivos, ponían en la picota, con tal de sumar algún votito extra.
Apenas asumido, Broglia había declarado: “me gusta el fútbol pelota al piso”, en un claro palazo a Miguel Angel Russo. Mikel, tragó saliva y le contestó en la cancha, con resultados. Dos pelotazos, dos jugadas de gol y a mandar a dormir a los pingüinos, que creen como nuestro presidente, que hay una sola fórmula para triunfar en el fútbol.
Otro gran acierto fue el ingreso de Barrientos. El pibe mató el partido, la tenía atada y no se la podían sacar, dándole la razón al técnico que se jugó por él al traerlo, cuando las críticas de campaña, eran “no traigamos pibes de Lanús, pongamos los nuestros”. Es evidente, que Barrientos, además de sus condiciones técnicas, tiene un gran carácter, a pesar de ser joven. En la semana, le habían amenazado a su familia, ante el silencio de los Dirigentes pechifrescos (grandes incentivadores de violencia) y de los nuestros. El morocho, les devolvió la gentileza con huevos. Una camioneta se arregla, pero el ojete a Lorente, le va a costar bastante tiempo, reponerlo de tal dilatación.

EL CLÁSICO Y LA VIOLENCIA

Desde el club del parque, se incentiva la violencia, ya sea desde su barra brava, que asesinó al principal dirigente opositor, como desde las distintas sub comisiones y los autocongelados, todos nenitos bien de clase media alta y talibanes del presi Lorente.
En Central, veo una movida que va tendiendo a eso. Con la barra brava, definitivamente instalada en el comando del club, se va avizorando un grupo minúsculo de fanáticos de esta comisión, generando violencia contra los pechos y entre mismos canayas.
Dios quiera que la Comisión Directiva, tome conciencia que no se puede alentar a los marginales, porque después el monstruo te devora a vos. Es lo que hoy, pasa en el club del parque; donde los parrilleros están copados por los narcos; es lo que nunca, queremos que pase en Central, aunque Miércoles a Miércoles, vamos perdiendo la batalla en el Caribe, que dicho sea de paso, tiene cada vez más ratas y mugre. Mas laburo, mas presencia y menos discursitos por los medios, por favor.

LOS CLÁSICOS DE VERANO


Ya ha demostrado esta Comisión, que con tal de engrosar la caja, se cagan en el socio y en el hincha. Tengan algo en claro: NO, A LOS CLÁSICOS DE VERANO. El prestigio de Central, no se regala ni se vende. Si los pechos quieren revancha, que esperen con la cola en hielo, hasta el próximo torneo; busquen otra alternativa para generar recursos, podrían empezar por cortar los protocolos, que tanto dolor de cabeza le dieron en el clásico, a los socios de bien, que quedaron afuera, y lo tuvieron que ver desde un bar.

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